Me gusta Neil Gaiman. Me gusta mucho, de hecho. Y, poco a poco, me van gustando cada vez más las novelas gráficas, de modo que ver que se publica El libro del cementerio de susodicho autor pues no hace más que darme una alegría. Publica Roca Editorial y cuesta 16,90 euros. Ojo, que es el primer tomo de dos, y el segundo aún no tiene fecha de salida. Lo digo porque seguro que os quedáis con ganas de saber cómo termina la historia.
Un bebé escapa casi de manera milagrosa de un brutal asesino que ha acabado con toda su familia. El pequeño se refugia en un cementerio y allí lo adoptarán los fantasmas que lo habitan. Así, acompañado de espectros y con su tutor Silas, el niño será bautizado como Nadie Owens y crecerá viviendo aventuras inimaginables para nosotros. La novela está adaptada por P. Craig Russell, junto a un gran equipo de dibujantes como Scott Hampton, Galen Showman o Jill Thompson.
Decir que Neil Gaiman es uno de los escritores contemporáneos más admirados es decir poco. Su obra magna The Sandman es un objeto de culto para millones de lectores de novela gráfica, pero su buen hacer no queda ahí. Autor de relatos, como su colección Objetos frágiles, novelas como Neverwhere, o incluso incursiones en el mundo cómico junto a Terry Pratchett en Buenos presagios, Neil Gaiman tiene prácticamente un libro para cada lector, y eso sin dejar de ser él mismo. Me encantaría saber cómo lo hace, de verdad.
Hace dos años ya que leí 'El libro del cementerio' y aún sigo acordándome de Nadie y Silas. Tengo muchas ganas de leer esta versión, porque Gaiman siempre consigue tocar mi fibra sensible, y este libro en concreto lo leí en un momento muy delicado, por lo que guardo recuerdos especiales. Es literatura juvenil, sí, pero eso nunca ha sido un impedimento para que disfrutemos de una buena lectura.
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En Papel en Blanco | 'El libro del cementerio', de Neil Gaiman